Nosotros

A todos nos habrá pasado, quizá en más de una ocasión, que muchas veces nos cuesta ubicar, a golpe de vista, a nuestro ocasional vendedor, lo que suele obedecer a una “mimetización” inapropiada del mismo con los clientes, al no poseer alguna identificación que lo distinga por sobre los demás asistentes al local comercial. En este aspecto, soluciones tan básicas como remeras idénticas o pines o carteles con el nombre del local e incluso del vendedor, pueden resultar desde la indumentaria del personal, la alternativa ideal para sortear cuestiones tan elementales como descuidadas por múltiples propietarios del rubro de ferretería.

Historia del proyecto

En materia de identificación de oportunidades de negocios redituables, una de las alternativas más antiguas que quizá existan en el mercado, la constituye el rubro de la ferretería, que a pesar de los cambios propios de la modernidad y las innovaciones tecnológicas, ha sabido consolidarse, permanecer y hasta mantener interesantes niveles de utilidades a sus propietarios, aún en tiempos de crisis.

En efecto, las ferreterías han pertenecido históricamente, a ese grupo cada vez más selecto de negocios capaces de sobrevivir a cualquier escenario financiero, en cualquier proceso histórico, convirtiéndose, asimismo, en emblema de los emprendimientos denominados “familiares”, donde el “testimonio” (como en una carrera de postas) ha de pasarse de generación en generación, junto con el fondo de comercio del establecimiento, de padres a hijos y luego de hijos a nietos.

Por lo general, esta “herencia” laboral suele ir acompañada de un proceso de construcción de las futuras generaciones, en las cuales el hijo ha de convertirse en el “aprendiz” del padre, aprendiendo sobre la marcha e in situ, a partir de la observación del “oficio” paterno, sobre todo lo relacionado a los usos y costumbres de esta clase de emprendimientos.

En este aspecto, en la actualidad existen herramientas más modernas y completas en la búsqueda del éxito comercial en el rubro ferretería, con empresas y consultoras que ofrecen sus servicios de asesoramiento a un sector históricamente tradicionalista y poco afecto a la modernización de sus técnicas, ofreciendo por ejemplo, desde mejores opciones de exhibición de los productos, pasando por alternativas de publicidad y sistematización de los recursos, hasta nuevas tendencias en materia de ventas y captación de clientes.

Nuestros usuarios

En efecto, hoy en día muchas ferreterías potencian sus productos y acrecienta sus utilidades, recurriendo a la venta por internet, mediante las denominadas tiendas virtuales, donde el propietario del viejo y tradicional local a la calle, puede continuar vendiendo o asesorando, aún fuera del horario de atención normal, desde su propio hogar o mediante cualquier dispositivo móvil.

En correlato, el diseño y la puesta en marcha de una página web, propia del establecimiento, puede resultar de suma preponderancia para hacer conocer los productos, de manera más masiva, así como para facilitar y abreviar los pasos de los futuros clientes, quienes podrán evacuar sus dudas y afinar sus búsquedas, a partir del asesoramiento que reciban de nuestra parte, por intermedio de esta clase de contacto y comunicación virtual.

Sin ir más lejos, en varios sectores del vasto universo comercial, muchos clientes hoy se ponen en contacto con sus potenciales proveedores de bienes y servicios, a través de herramientas informáticas de comunicación virtual, tales como las videoconferencias vía “Skype”, sistema mediante el cual se agilizan los consultas, se optimiza el asesoramiento y se cierran múltiples ventas, sin necesidad de moverse de sus hogares los unos, y desde donde fuese, dentro o fuera del horario comercial, para el caso del propietario del establecimiento.

Finalmente, la innovación tecnológica también ha llegado hasta los procesos contables y de stock de negocios tan tecnológicamente díscolos como las ferreterías, a partir de la incorporación de nuevos y completos softwares, para administrar y controlar la facturación, el stock y la administración de los negocios, a fin de optimizar y potenciar una gestión comercial tan tradicionalmente “artesanal” como detenida en el tiempo.